Polonnaruwa, Sri Lanka. Foto: Ángel M. Bermejo (c) |
Sigiriya es sólo uno de los restos del pasado glorioso de Sri Lanka, la "Isla Resplandeciente", que muchos describen como una perla colgada a los pies de la India. Ambos países están separados por un estrecho canal poco más ancho que lo que puede alcanzar la vista, y donde se encuentra el Puente de Adán. India, el inmenso vecino, ha dominado la historia y la cultura de Sri Lanka desde hace siglos.
Sigiriya está incluida dentro del Triángulo Cultural de Sri Lanka, donde se incluyen los grandes enclaves históricos y las antiguas capitales singalesas como Kandy, Anuradhapura y Polonnaruwa. Muchas de ellas fueron verdaderas ciudades perdidas, olvidadas completamente al ser devoradas por la selva, y durante siglos no fueron más que leyendas transmitidas de padres a hijos pero que nadie había visto.
Polonnaruwa, Sri Lanka. Foto: Ángel M. Bermejo (c) |
Hay por ello una cierta sensación de penetrar en un mundo mítico al adentrarse en las ruinas de Polonnaruwa, la capital engrandecida en el siglo XII por Parakrama Bahu el Grande, al deambular entre lugares sagrados, palacios reales, pabellones, baños, parques y jardines levantados para el placer. Pensar que el gran vatadage, con la dagoba, con sus figuras de Buda sentado y su muralla circular estuviera comido por la selva y haya vuelto a la vida es como recuperar una civilización perdida. Ya recordé el detalle sorprendente del Gal Pota, el "Libro de Piedra" de nueve metros de largo, repleto de inscripciones realizadas hace mil años que todavía pueden ser leídas por los peregrinos actuales.
También recordé hace unos días que aquí se encuentra el conjunto de Gal Vihara, con sus cuatro grandes imágenes de Buda talladas directamente sobre un gran bloque de granito. Cuando llegamos, las ofrendas de incienso humeaban delante de cada uno. La gran figura del Buda reclinado, de 14 metros de largo, le muestra entrando en el nirvana. Lo repito: mirar su rostro sereno es enfrentarse a una civilización distinta a la nuestra, a otra forma de entender el mundo.