Algo ha cambiado en los últimos años en la
comunicación viajera, tanto en la forma en que se busca como en la que
se trasmite. La aparición y la posterior popularización de internet ha supuesto
una revolución en la manera de comunicarse. Tal vez, por vivirla desde dentro, no
seamos capaces de apreciar la magnitud de los cambios que representa esta nueva
forma de comunicarnos con los demás.
El mundo de los viajes ha
incorporado la comunicación 2.0 con tanta naturalidad que ya no nos acordamos
de cuando todo se hacía de otra manera. Las generaciones más jóvenes no pueden
entender cómo se preparaban los viajes, cómo se viajaba sin internet. El
viajero que hace 30 años emprendía un viaje un poco largo tenía, en muchos
aspectos, más parecido con un aventurero del siglo XVIII que con uno actual.